Varsovia

¡Descubre Varsovia antes de que se haga famosa!

No nos malinterpretes, Varsovia es un destino popular, pero puesto que Cracovia ha recibido mucha más atención de los turistas en los últimos años, Varsovia sigue pasando un poco más desapercibida. Por lo tanto, si buscas algo diferente, no sigas a las multitudes, sigue a tu corazón hasta la sofisticada y cosmopolita capital de Polonia.

Varsovia es la ciudad más grande de Polonia. Esta extensa metrópolis se asienta junto al río Vístula, que es el más largo del país. Pero esto no es lo único grande de Varsovia.

¡Nos impresionan y nos sorprenden mucho más las playas de la ciudad! Especialmente porque Varsovia está a 260 km del mar. No encontrarás un río como este en otras capitales europeas y National Geographic y The Guardian designan a las playas de Varsovia como algunos de los entornos urbanos más bonitos del mundo. Los bulevares del Vístula tienen terrazas panorámicas, pabellones de comida y embarcaderos, mientras que en la orilla derecha del río está Natura 2000, un hábitat protegido para el anidamiento de aves.

De vuelta en la orilla izquierda, encontrarás el Parque Multimedia de Fuentes. Hay espectáculos de agua todas las tardes y espectáculos de luz láser todos los viernes y sábados por la noche. El ambiente es eléctrico.

Para viajar entre las dos orillas del río, súbete a un ferry gratuito cuando el nivel del agua lo permita o reserva un recorrido en tranvía acuático para tener una vista totalmente diferente de la ciudad.

Cerca, encontrarás el Museo sobre el Vístula, sede temporal del Museo de Arte Moderno, y la galardonada Biblioteca de la Universidad de Varsovia: aunque no seas un amante de los libros, merece la pena hacer una vistita al jardín sobre el tejado para tener una experiencia realmente sensual.

Varsovia también es una ciudad increíble para las familias: ¡hay muchas cosas para mantener a los niños entretenidos! Los museos tradicionales se mezclan con atracciones interactivas para que aprender sea más llevadero. ¡Ni siquiera sabrán que se están cultivando! El Centro de Ciencia Copérnico ofrece fascinante información de cómo está compuesto el cuerpo Y una exhibición de robots, entre otras exposiciones. El Museo de las Muñecas no es solo para niñas y el Museo de la infancia es un mundo de descubrimiento, ¡literalmente! Los niños pueden tocar las exposiciones, disfrazarse y crear sus propias historias. En el Museo de la Evolución, puedes hacerte un selfie con el esqueleto de un enorme reptil y conocer al Tarbosaurus, un pariente menos conocido del Tyrannosaurus rex.

Los niños también estarán contentos con las bicicletas de la ciudad. Puedes alquilar la tuya en alguno de los parques de Varsovia y los 20 primeros minutos son gratuitos, por lo que no cuesta nada darse una vuelta. Es una de las mejores formas de ir a ver sirenas (las sirenas son el símbolo de la ciudad y hay muchas esparcidas por sus calles y plazas).

Hay mucho más que descubrir para los niños, pero no podemos dejar de mencionar el casco antiguo de Varsovia. No es tan antiguo, ya que se reconstruyó después de la guerra, pero tan fielmente que nadie lo diría. Está tan bien hecho que la UNESCO lo incluyó en su lista del Patrimonio Cultural de la Humanidad. Da un paseo por las encantadoras calles hasta la Plaza del Mercado, donde podrás disfrutar del arte, los restaurantes y las cafeterías o dar un paseo en cochecito. ¿Y la guinda del pastel? Varsovia sigue siendo una de las ciudades más valoradas para visitar en Europa.